Atravesada por el histórico río Genil, una singular arquitectura industrial del S.XIX se extiende por sus dos orillas. Destacan sus tradiciones, sobresaliendo la Semana Santa; su legado histórico-arqueológico, como la villa romana de Fuente Álamo; o su gastronomía, con su afamado dulce de membrillo.
Puente Genil no se entendería sin el río que le da nombre y que, desde la antigüedad, ejerció una influencia clara en todo el territorio.
El origen fundacional del municipio se debe a la unión administrativa y demográfica entre la denominada villa «Pontón de Don Gonzalo», fundada en tiempos del rey Fernando III a cargo del potentado Gonzalo Yañez Dovinar, y emplazada en la margen derecha o cordobesa del río Genil, y el pequeño núcleo poblacional denominado Barrio de Miragenil, sito en la orilla contraria y perteneciente administrativamente a la provincia de Sevilla. Durante la regencia de Mª Cristina (1.834) tuvo lugar la referida unión entre ambos núcleos, creándose el actual Puente Genil. En la actualidad, la pueblan unos 30.000 habitantes.